jueves, 2 de febrero de 2017

EL TREN ROJO (LE TRAIN ROUGE)

Hace tiempo que tengo abandonado el blog, básicamente por falta de tiempo, y un poco también por escasez de salidas productivas; antes que nada tengo que decir que la excursión objeto de esta entrada se hizo el 5 de Junio del año pasado, pero que dado que hay gente que me ha preguntado por ella al ver un video en mi facebook, considero interesante dedicarle una entrada a dicha excursioncilla, porqué es una escapada factible en un día (aunque si tuviese que hacerla ahora, la complementaría con más días) y está relativamente cerca ( para los que vivimos en Barcelona o alrededores).
Bueno, después de esta mini-introducción,al grano.
La excursión la planificamos  con unos dos meses de anticipación, junto a mis compañeros Jaime y Vicente (tanto monta,monta tanto) , y desde un principio, quedó meridianamente claro que la íbamos a hacer en compañía de nuestras parejas. A ellos/ellas (Vicente,Jaime,Montse y Ester) va dedicada esta entrada, por lo que me tomo la libertad de adjuntar alguna fotillo de grupo.

LA LINEA DE TREN (UN POCO DE HISTORIA)

La línea objeto de la escapada es una línea de ancho internacional (1.435 mm), que fue construida por la Compañía del Midi francesa, como una forma de acortar el camino desde la zona fronteriza con España hacia Carcassonne, y Toulouse, sin tener que dar un rodeo por Narbonne. Se construyó entre 1876 y 1904, en dos secciones. El trayecto empieza en la estación de Rivesaltes ( a unos 6-7 km de Perpignan en dirección a Narbonne, y finaliza en la bonita ciudad de Carcassonne, después de recorrer lo que se denomina el País Cátaro y de la buena gente ( Le Pays Catar des bons homes), a través del valle y desfiladeros que forma el rio Agly, pasando por las importantes villas o ciudades de Sant Pau des Fenoullides, Caudies, Axat (donde se adentra ya en el valle del Aude) Quillan y Limoux hasta desembocar en Carcassonne (villa espectacular y medieval que merecerá una pronta visita).
Construida en vía única, sin electrificar, en la actualidad, sólo está abierto al tráfico comercial de viajeros por la SNCF el tramo entre Carcassonne y Quillan, servido por automotores X-73500, del mismo estilo que los que operan el recientemente reabierto tramo Oloron-Bedous, de la línea transpirenaica del Canfranc, subvencionado, por el el Consell Regional ( un equivalente a CCAA españolas, por hacer un símil)
El tramo entre Quillan y el desfiladero de St Martin Lys, un poco antes de Axat ,está absolutamente fuera de servicio ( en esta fecha no tengo constancia que sea reabierto para cualquier uso) y desde aquí hasta Rivesaltes, con un trayecto de aproximadamente 65 km, forma lo que conocemos como la línea del Tren Rouge, cuya explotación fue concedida a la empresa  Tren del País Cátaro y las Fenoullides   , formada, atención, por !!VOLUNTARIOS!!, que le dedican su tiempo, en todo tipo de labores: conducción de trenes,maniobras, mantenimiento, recepción en estaciones, etc .    Facebook tpcf
 La asociación “Train du Pays Cathare et des Fenouillèdes” (TPCF), creada por un grupo de aficionados al ferrocarril en 1993, se propuso desarrollar trenes turísticos sobre esta línea infrautilizada, lo cual se comenzó a hacer realidad entre los años 2000 y 2004.
En la actualidad, el parque motor utilizado para el cometido turístico, está formado básicamente por automotores tipo x-4500 ex-SCNF, llamados CARAVELLE , traspasados a la sociedad turística TPCF, aunque la compañía dispone también de un Picasso, que sale a circular en alguna que otra ocasión.






También dispone de varios coches de viajeros en proceso de restauración así como vagones de mercancías y locomotoras tipo BB-63000 ex.-SCNF, similares a las Eurofirma españolas (serie 307) para un tráfico residual de mercancías en la línea; se trata de un convoy que funciona algún día de la semana para transportar mercancías de las fábricas de "La Provençale" y "Imerys"

LA ESCAPADA (COMO LLEGAR)

Trayecto sencillo y con pocas complicaciones (fácil incluso si no quieres depender de la tiranía del GPS).
Desde Barcelona AP7 hasta la frontera, donde se enlaza con la A-9 ( la catalanne) francesa, y saldremos por la salida 41 (Perpignan Nord-Rivesaltes), para desde allí acceder al interior de Rivesaltes, donde no es dificil llegar a la GARE (estación), donde es factible dejar el coche estacionado todo el día. No nos cobraron por el parking.
En la estación de SNCF hay una pequeña dependencia de TPCF, donde una voluntaria nos hace la recepción de los billetes (adquiridos a través de la web  http://www.tpcf.fr/   , además nos explicará todo lo relacionado con la jornada que viviremos ( en francés, pero también en un correcto castellano, incluso en catalán).

También hay que decir que el voluntario maquinista que nos llevará hasta Axat, permite que estemos hasta dos personas más junto a él , en la cabina de la automotora, incluso pudiendo hacer sonar el silbato ( lo que hace las delicias de algún niño que viaja también con nosotros). Resumiendo, un verdadero tren turístico donde todo son facilidades , y donde además se nos permite bajar a hacer fotos en todas las paradas, siendo informados de cualquier incidencia que haya , para poder estirar las piernas y usar la cámara, cosa que sucedió a la vuelta.

Sólo una pega, medio imputable también a nosotros, por desconocimiento del tema, y medio imputable al restaurante donde comimos. Os explico: puedes comprar el billete para varios trayectos intermedios. Evidentemente nosotros escogimos el trayecto largo, que llega un poco más arriba de Axat, a las puertas del desfiladero de St Martin de Lys; eso quiere decir más tiempo de trayecto a la ida, y coger el tren a la vuelta un poco antes.
A pesar de que nos aseguraron que no había ningún problema y que el tren podía esperar unos minutos, fuimos de bólido para comer, y con el miedo en el cuerpo, controlando el reloj; no nos hacía mucha gracia quedarnos sin coger el tren de vuelta.
Optamos por el Restaurant Le Rebenty, a unos 2 km de Axat, justo a unos 100 metros de donde acaba el trayecto total. Como salía en la web de http://www.tpcf.fr/  llamamos para reservar una semana antes, y no hubo ningún problema. 
La entrada al restaurant, a 100 mts del final del trayecto trenero

La comida fue muy correcta, pero hete aquí lo que creo es otra nímia pega: si hay un tren turístico que te llega a las puertas del restaurante, y además tienes gente que te ha reservado la mesa por teléfono (nuestro caso y varios más) , pienso que no cuesta mucho contratar alguien más ( el tren turístico funciona todo el año domingos, pero en temporada veraniega, también sábados más algunos días intersemanales) ya que aseguras un buen servicio. Repito, nada que reprochar (el camarero hablaba en un casi perfecto castellano, con lo cual se facilita todo) en cuanto a comida, sólo el tener que esperar más de la cuenta y no poder pedir lo deseado (por premura de tiempo). Aunque quizás una buena idea,como sugerencia, sería adelantar media hora la salida desde Rivesaltes  y atrasarla media hora más desde Axat. Pero hay que tener en cuenta que el personal es voluntario , y es de agradecer el esfuerzo que realizan, además pienso que por un módico precio para un tren de estas características.

El regreso a Rivesaltes , evidentemente fue un poco más relajado (hubiese caido una buena siesta de no ser por las ganas que teníamos de ver lo que no habíamos visto a la ida). 
Por cierto, comentaros que la Caravelle hace el trayecto desde Rivesaltes hasta Caudies de Fenoullides e inverso ( aproximadamente mitad de trayecto). Allí se cambia a un tren formado por una BB 63000 y vagones tipo jardinera, que es el que nos lleva hasta Axat, a través de unos parajes espectaculares.
A los aficionados treneros, les recomiendo de verdad no perder ni un detalle, y a poder ser, estar cerquita de la cabina de la BB 63000 o dentro de la cabina de las Caravelle.
















A la vuelta, tuvimos que hacer una parada técnica en Sant Pau de Fenoullides por un problema en un paso a nivel , que no daba la señal de haber pasado, y no levantaba las barreras. El maquinista hizo retroceder el tren hasta liberar ( todo ello sin atisbo de "cabreo" de los automovilistas, con una paciencia franciscana)

El recorrido, tanto a la ida como a la vuelta es espectacular, absolutamente recomendable. A nuestra llegada a Rivesaltes, una media hora más tarde de lo estipulado, aún nos quedaron arrestos para coger el coche, y llegar hasta Figueras por carreteras nacionales, para poder disfrutar hasta el final de una salida extraordinaria.

Las fotografías y videos son indistintamente nuestras